¿Cómo podemos saber si nuestra campaña de marketing ha sido un éxito? Muchas veces pensamos que si las ventas suben, por ejemplo, es porque hemos hecho bien nuestro trabajo. Pero no es algo tan sencillo. La respuesta está en lo que se conoce como índice de redención. Lo analizamos.

Qué es el índice de redención

Para empezar, se trata de algo que podemos obtener una vez que la campaña ha finalizado. En ese momento, tenemos que dividir los casos de éxito entre el número total de personas contactadas.

Para medir estas últimas contabilizaríamos cada correo, llamada o acción publicitaria directa que hayamos realizado. La cifra que arroja no significa nada de por sí, hay que ponerla en contexto o medirla con los índices de redención de campañas futuras y pasadas que hayamos hecho. Y ahí es cuando podemos observar si nuestro trabajo como publicistas mejora o empeora.

La importancia del índice de redención

Lo fundamental de acostumbrarnos a emplearlo es que nos permite tener una visión lineal más exacta sobre el tipo de trabajo que realizamos. Se trata de uno de tantos métodos o trabajos de análisis que tenemos que realizar para saber si nuestro método de trabajo es el adecuado.

Si, por ejemplo, hacemos una campaña en varias etapas o pasos también lo podemos emplear para medir cada uno de esos momentos. Y, de esta manera, ir corrigiendo o mejorando nuestra manera de actuar a medida que avanza la campaña, para perfilarla y reorientarla mejor.

En conclusión, el índice de redención es uno de los sistemas más interesantes que hay para entender adecuadamente cómo ha funcionado una campaña. Nos permite hacernos una idea de su éxito, de su alcance y de hasta qué punto la inversión ha sido la correcta. Con todo, siempre son necesarios más datos para valorar su éxito.